En Provenza existe un momento único en el que la tierra y el cielo se funden en un voluptuoso abrazo reflejando una luz dorada e inimitable. Cuando esa icónica luz alcanza su cénit al atardecer, en la llamada Hora Dorada, cuando un cielo cálido y efímero envuelve la Provenza.
El acorde perfecto, una fusión gourmand y aromática fresca. Terre de Lumière es la primera esencia aromática-gourmand de L’Occitane.
El diseño del frasco está inspirado en el lujo de la sencillez; ese lujo que La Provenza representa tan bien. De líneas puras y elegantes, éste va rematado por un tapón color ámbar que representa un guijarro recogido en un campo de
lavanda al atardecer. Un toque muy sensorial. Sencillo, elegante e icónico, el frasco evoca las doradas tonalidades de esta tierra, con su mágica y única luz.